Desde la más absoluta fraternidad, y sopesando las profundas diferencias políticas que existen entre las fuerzas destinatarias de estas palabras, nos dirigimos a Ustedes en estos días cruciales para la clase y la para la patria.
Pese a no haber suscrito el acuerdo por la paz del 15 de noviembre pasado, y de mantener la crítica hacia ese pacto, en tanto fuerza política y social, las y los igualitarios, participamos activamente en la campaña por aprobar una Nueva Constitución por la vía de una Convención Constitucional, particularmente desde el Comando Apruebo Chile Digno. Este horizonte de transformación sigue siendo considerado estrecho y limitado, la lucha que venimos dando hace años es por una asamblea constituyente en que los pueblos de Chile puedan ejercer plenamente su soberanía política, de todas maneras y no obstante el corto alcance del proceso en curso, consideramos innegable que, en una perspectiva histórica de largo plazo, la nueva constitución será el resultado de un ejercicio democrático que las generaciones anteriores no vieron.
El actual proceso tiene una serie de amenazas que, de hacerse efectivas, pueden llegar a anular todo el sacrificio, la lucha, las esperanzas y los dolores de nuestros pueblos. Uno de esos peligros es la dispersión de las fuerzas políticas y sociales anti-neoliberales, y en paralelo, el rearme y la re-oxigenación de las fuerzas políticas neoliberales que co-gobernaron tres décadas con la derecha, administrando y reforzando el modelo; nos referimos a los partidos de la ex – concertación y los partidos que hoy se han aliado con ellos.
A través de la presente, elevamos a Ustedes un llamado a construir la unidad política y social contra el modelo en el marco de las elecciones para convencionales-constituyentes. Entendemos que hay diferencias profundas entre nuestras organizaciones, pero dejar que ellas administren este momento es entregarle una parte importante del proceso constitucional a las fuerzas políticas que han operado y seguirán operando bajo la lógica de la protección y administración del modelo.
El tiempo apremia, los plazos son cortos y las decisiones que hay que tomar deben orientarse hacia el empuje colectivo y el desborde popular de la convención constitucional. El horizonte inmediato debe ser la unidad en torno a un mecanismo de configuración de lista en que el conjunto del pueblo pueda expresarse, con y sin militancias, priorizando a luchadores y luchadoras sociales de trayectoria demostrable en el campo popular y la histórica pelea por la reconquista de los derechos sociales usurpados en el neoliberalismo.
Es por esto que la militancia, organizaciones y movimientos sociales igualitarios, empujaremos la construcción distrital de cabildos y asambleas en que esperamos encontrarnos con las organizaciones integrantes de Unidad Social, la Coordinadora No + AFP, MODATIMA, Coordinadora 8M, FENAPO, y todas las asambleas, movimientos y organizaciones de la más amplia diversidad, para construir de forma democrática el listado de convencionalistas más leales a las luchas por el Buen Vivir y el cambio de modelo económico y político del país, junto al Mandato Constituyente que deberán obedecer y cumplir para asegurar que a la convención constitucional puedan llegar las fuerzas transformadoras de los pueblos habitantes de Chile y conquistar una constitución que deje atrás el neoliberalismo y nos acerque a la reconquista de los derechos sociales ampliamente anhelados.
Esperamos que nuestras palabras se asienten en la voluntad, la generosidad y la comprensión de lo que está en juego y que las fuerzas políticas del Frente Amplio, Unidad para el Cambio, Dignidad Ahora, Partido Ecologista Verde, Unión Patriótica y el Partido de los Trabajadores Revolucionarios, puedan poner sus militancias y legalidades al servicio de este proyecto social, constituyente, transformador y unitario.
Les abrazamos fraternalmente.
Comisión Política Partido Igualdad, 04 de noviembre 2020.
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