Hostigamiento, montajes y cacería: cotidiano en La Araucanía

Cuando se trata de hostigar abogados y luchadores sociales mapuche, la inteligencia de carabineros es definitivamente tremenda creativa. La Operación Huracán marca el momento de mayor estupidez policial, por lo burdo del montaje, pero expresa al mismo tiempo la sensación de impunidad con que actúa la policía, especialmente cuando se trata de causas relacionadas a la lucha mapuche.

Cuando todas les versiones institucionales se cayeron, cuando no hay ni el menor rastro, ni una diminuta prueba contra los ochos procesados de la Operación Huracán, y cuando todas las miradas apuntan cada vez más hacia el alto mando policial -general Villalobos incluido- y autoridades políticas del gobierno de Bachelet -Aleuy por ejemplo- hoy, efectivos de inteligencia usan su tiempo y sus recursos para hostigar y amedrentar de manera constante a las defensas de los comuneros absueltos y a los mismos comuneros.

Abogados

En el marco de la Operación Huracán, carabineros practicó de manera absolutamente ilegal, escuchas telefónicas a más de 200 personas, entre ellas (comprobado en el desarrollo de la causa) a las abogadas Karina Riquelme, Manuela Arroyo y el abogado Nelson Miranda. Se trata de defensores permanentes de causas mapuche, que han logrado importantes absoluciones en casos muy emblemáticos, de esos que la prensa ventila ruidosamente para “comprobar” que hay terrorismo en la Araucanía, pero que guarda silencio cuando caen los montajes.

La situación puntual de Karina Riquelme, que estando con su hija al interior de su vivienda fue apuntada con un puntero láser, es parte de un contexto de hostigamiento que se suma a las fotografías que les toman en las audiencias, como las que les hicieron a las abogadas Riquelme y Arroyo. Encarado al día siguiente por el abogado Rodrigo Román -audiencia de formalización montaje operación Huracán- lograron que el individuo se retirara de la sala sin lograr establecer su identidad, aún cuando el tribunal se lo requirió, dando solo su nombre: “Oscar”.

Hostigamiento a mapuche.

Han vivido exactamente la misma situación, a las fotos se suma el hecho de que en Malleco, Vilcún y Lleu lleu, los ocho imputados en el montaje y luego absueltos, han sido hostigados de manera permanente, incluyendo funcionarios policiales de punto fijo a metros de sus viviendas, expresando garabatos e insultos racistas.

Se trata de un acto ilegal y de venganza, revanchismo, ante la enorme evidencia que existe de que la única asociación ilícita fue por parte de la inteligencia policial, acreditada en la audiencia de formalización a la cual le falta identificar a la totalidad de todos sus integrantes que muy probablemente se encontrarían tanto en los altos mandos de carabineros, en los fiscales del ministerio público y en autoridades políticas del gobierno de Bachelet, Aleuy por ejemplo, que corrió a Buenos Aires y dio entrevistas hablando de las “pruebas” de la Operación Huracán que vinculaban comunidades mapuche de Chile y Argentina en en el tráfico de armas.

En política, dicen, nada es casualidad.